Coalette, la buena nueva

Coalette, la buena nueva

Deep inside the hollows of the Devil's Vein

The children mined through sweat and pain

When the gold was found, the kids were forced inside

The tunnel collapsed, and that is where Coalette died

Serie: 34

Fecha de muerte: DESCONOCIDA 

Poema:

Within the first hour she knew they were in trouble

Coalette was the third to succumb in the rubble

She tried clawing her way out but there is no escape from the Devil's Vein

Now her ghost haunts the old mine where her body remains

Fecha: 20/07/2018

Precio y estado: $2.000, nueva

Localización: Recoleta. En el Showroom de "El calabozo mutante"

Estoy tratando de recordar cómo fue que di con ella. Una cosa es segura, fue buscada. Recuerdo también haberla visto publicada en Mercado Libre junto con otros más que quizás todavía sigan en venta allí, pero también tengo el vago recuerdo de haberla visto en grupos de Facebook. Lo cierto es que en ese momento y habiendo pasado cuatro meses desde mi última compra, todavía estaba incursionando en las búsquedas y seguía siendo Mercado Libre mi principal fuente de información. No obstante empecé a descubrir los grupos de coleccionistas y las publicaciones en redes sociales como Facebook y los horizontes se expandieron.

Coalette formaba parte de un grupo de Living dead dolls pertenecientes a unos coleccionistas que tenían un Showroom (un departamentito en Recoleta) donde exponían sus objetos de colección, mayormente muñecos de toda índole. La mayoría de ellos eran muy vintage y las Living dead dolls le daban a la colección un toque más de moderno que no coincidía con muchas figuras a su alrededor, sobre todo las de terror. Fui con Seba, una vez más y como siempre, no sin antes hablar con el vendedor por medio de su página en Facebook y haberle mencionado que iría tal día. Se trató de un veinte de julio de 2018, día del amigo, y particularmente un día horrible. Llovía incesantemente y hacía mucho frío. Habíamos aprovechado para pasear por el Cementerio de Recoleta y antes de abandonar la capital, pasamos por el dichoso lugar.

Ella estaba arriba junto con otras más. No recuerdo muy bien al resto,  creo que estaban Soot, Canary y Tommy Knocker entre otras figuras de películas como "El exorcista" y una que no había estado publicada, y llamó mi atención. De todos modos ninguna me despertaba más interés que Coalette. Seamos honestos, al lado de sus hermanos (es decir, compañeros de la serie) ella es la que más destaca por su diseño y la que le sigue es, quizás, Ash Lee (la cual no estaba porque seguramente la compraron primero) Me sentí realmente dichoso de estar en ese momento, en ese lugar. Porque, caso contrario, estoy seguro de que la hubieran comprado tiempo después. Creo que sus hermanos todavía siguen allí, ya que... bueno, son un poco feos y estamos en un país donde no sé si vale tanto la pena gastar mucho dinero por un muñeco no muy bien diseñado.

Así que, como dije, estuve en el momento y lugar indicados y Coalette era toda mía ¡Además era la primera Living dead doll nueva que compraba! ¡La buena nueva! Totalmente cerrada y lista para salir al mundo por primera vez nada más y nada menos que de mi mano. Fui su primer padre legítimo, hablando en términos ñoños.

Se unió pronto a mi grupo que ahora tenía tres miembros junto con Sadie y Cracked Jack ¡Y está entre mis favoritas desde entonces!

Por su aspecto, diría que Coalette es más un fantasma que un no-muerto. Ella y el resto de los niños de la serie fueron un  grupo de chicos obligados a trabajar en la mina "The devil's  vein" donde habían encontrado oro y... bueno, era común explotar a los niños en las minas (¿O lo sigue siendo?) La cuestión es que, como recita su poema, Coalette sabía desde un principio que algo andaba mal. Pero en vano fue este presentimiento, ya que no la salvó de morir con el resto al derrumbarse la mina.

Según dice su etiqueta, ella es un fantasma que vaga por este mundo mientras su cuerpo yace aún allí, descomponiéndose. Me encanta que tenga los ojos totalmente ennegrecidos y que su piel sea pálida. Se ve también que corren lágrimas apenas perceptibles por sus ojos y su vestidito antiguo es hermoso.

Como dato, aclaro que esta edición podía traer con alguno de sus muñecos una pepita de oro. Si tenías suerte podía tocarte una de ellas. Claramente, yo no soy un tipo con tanta suerte así que... no fue mi caso.

Sadie, la joya inesperada

Sadie, la joya inesperada

Watch this little one,

She's pining away,

With her butcher's knife,

Coffin purse

And black bouquet.

Serie: 01

Fecha de muerte: 26 de octubre de 1969

Poema:

No one cared how she turned up dead.

So Sadie chose to rise instead.

Being easily forgotten wouldn't be fair,

Death was something this child had to share.

Fecha: 04/03/2018

Precio y estado: $1.100, usada

Localización: Belgrano, Cabildo y Juramento. Fue punto de encuentro con una ucraniana que me la vendió.

Creo que se llamaba Julia o algo así... Esta mujer creo que no sabía lo que hacía cuando publicó en Mercado Libre una Sadie ¡La primera Living dead doll jamás hecha! Hay varias versiones de la misma pero, tras investigar me di cuenta de que se trataba de una viejísima Sadie, salida de la primera camada de la saga. Estas vienen con mucha menos articulación que las demás, es más enanita y bueno, no se mueve mucho que digamos. Cuando la vi ¡Y al precio que la vi aún para ser usada! Supe que mi Cracked Jack no iba a estar solo y que tenía que tenerla. Creo que en ese entonces no sabía aún que estaba dando inicio a un espíritu coleccionista en mí que con el tiempo se haría más ambicioso y puntiagudo, pero sin dudas la segunda compra fue decisiva.

También fue por Mercado Libre, ya que en ese entonces no conocía otro medio. La ucraniana, que seguramente está viviendo acá, me sugirió contactarla por otro sitio web de ventas que no recuerdo lamentablemente y allí hicimos el arreglo de vernos en Belgrano, Cabildo y Juramento. Entonces, un 24 de marzo de 2018 fui, también con Sebastián, a buscarla. Allí estaba la chica con su marido, bien adinerados los dos (o al menos eso aparentaban) con Sadie, la cual vino con su caja, pero la misma sin el forro interior, sin la etiqueta, sin el certificado de defunción y sin los elementos que son propios de Sadie (un cuchillo y un libro) ¡Pero qué carajos! ¡Tenía en mis manos una Sadie original de la primera camada y a un precio excelente! De seguro esta tal Julia de saberlo se habría querido matar ¡Pero así  son las cosas en el mundo del coleccionismo! Y lo estaba aprendiendo.

Vino un poco sucia, con algunas partículas de andá a saber qué en su cabello y fue necesario peinarla varias veces y comprar un papel para reemplazar el forro interior del ataúd. También imprimí su etiqueta, pero no quedó tan bien como esperaba.

De todos modos las condiciones de Sadie son casi perfectas ¡Y es todo un misterio saber de dónde vino! ¿La habrá traído esta ucraniana de allá? ¿La tendrá de otro país? ¿Dónde la habrá comprado? ¿Por qué la tendría ella? Digo, no tenía aspecto para nada de coleccionar este tipo de muñecas... ¡Jamás lo sabré! 

Sadie fue el primer modelo creado. Su poema remite a una niña, aparentemente muy sola y dejada de lado por todos, al punto de que nadie conoce la causa de su muerte. Lo que sí se sabe es que decidió revivir para hacerse ver, y aquí está.

De seguro algo de asesina ha de tener, por el cuchillo que lleva en sus manos (salvo la mía, que andá a saber dónde quedó) aunque no hay registros de posibles asesinados cometidos por ella. Sadie es la marca distintiva de Living dead dolls y viene con varias versiones y alternativas, solo porque es como el Pikachu de Pokémon. Ocupa un lugar muy preciado en mi colección no solo por ser la segunda que conseguí, sino que también por ser una rarísima versión de las primeras sacadas y la verdad que jamás pensé que tendría una así ¡Y de una manera tan fácil! Por eso agradezco a la vida la oportunidad que se me presentó y que, obviamente, tomé. Desde entonces estoy atento a cuanta oportunidad se cruce, para no perder joyas inesperadas, como ésta.

Cracked Jack, el primogénito

Cracked Jack, el primogénito

What prize lies inside

Of this little boy's coffin?

One that can be applied

And eyed by others often.

Serie: 25

Fecha de muerte: 30 de octubre de 1893

Poema:

A sailor in the fog, poor Jack was stranded at sea

His boat was torn to pieces and he floated with the debris

The wreckage was found the next day amongst the docks

But Jack's body washed up later smashed against the rocks

Fecha: 11/09/2019
Precio y estado: $900, usado
Localización: Caballito, Parque Rivadavia, a un empleado de un gimnasio frente a Parque Rivadavia localizado por Mercado Libre

Cracked Jack fue el que más llamó mi atención aquella noche que decidí comprar por primera vez una Living dead doll. No recuerdo cuáles más estaban pero sí me acuerdo de que no me costó mucho decidirme por él. Estaba usado, perteneciente a la colección de un hombre que trabaja en un gimnasio frente a Parque Rivadavia, en Caballito, Ciudad de Buenos Aires. Lo tenía a $900 y fui a buscarlo, tomando el tren hasta Caballito con la compañía de Seba y caminando hacia el Parque Rivadavia el once de septiembre de 2017. Esa fue la primera vez que compré un Living dead doll. Vino en buen estado, aunque usado, con su certificado de muerte y su ataúd, que con el tiempo se deterioró su tapa transparente. El anterior dueño me comentó que coleccionaba Living dead dolls y que decidió vender su colección por falta de espacio. Anteriormente, según él, tenía muchas más.

Cracked Jack, increíblemente está entre los menos queridos, a mí me encanta, sobre todo porque es una parodia de Cracker Jack, el personaje de la marca de pochoclos que lleva el clásico marinero y que se hizo conocido cerca de 1900. Aparentemente, en este caso, se trata de un niño marinero cuya vida acabó por un accidente en el mar, que le causó las múltiples fracturas en su cuerpo y, especialmente, cráneo. Viene en un cofre plateado, debido a que es parte de la serie que celebra los veinticinco años de la franquicia.

Me mandé a hacer una remera con su personaje, debido a que es mi primogénito y merece el honor, obviamente y también un coleccionista de Reino Unido hizo un dibujo suyo, para mí.

Dibujo hecho por Lucas Robertson

El despertar

El despertar

Ed Long  y Damien Glonek comenzaron sin darse cuenta con el monstruo que hoy es Living dead dolls en 1998, en New Jersey. En ese entonces yo tenía doce años, el mundo de las comunicaciones globales estaba a pocos años de desarrollarse, pero aún extremadamente limitado y, por supuesto, no tenía forma de saber de su existencia. De hecho, ni siquiera tenía idea de la identidad que estaba moldeando.

La clave fue mi año sabático, ese ocioso y, afortunadamente corto ciclo hasta que me decidiera qué quería que fuera mí (como si lo hubiese sabido, alguna vez) y que llenaba mis horas en la búsqueda de algo que me identificara, que me liberara de ser plano, incoloro y otorgara un sentido a mi nombre.

Tenía entonces dieciocho años cuando por fin llegó el mundo de la banda ancha a Argentina (seguramente tarde, como llega todo acá) y me vi frente a las puertas de las infinitas posibilidades que ofrece el mundo en red (imagínense ahora, si entonces ya era infinito) 

Las redes sociales, si no existían, eran limitadísimas y aburridas, no existía la interacción directa con personas salvo en contados espacios como myspace o fotolog (¡Cuánta vejez!) Es por eso que uno se valía de sus dotes para la investigación en sitios de interés y buscadores para encontrar las diferentes entradas a aquello que despertaba la atención (no, no había hashtags ni tanto control que te sugiere publicidades o productos según lo que investigan de vos) Los blogs eran una gran herramienta y fue así cuando, desde el momento en que aterricé en el oscuro mundo del cuestionamiento existencialista que brindan algunas filosofías en conjunto con la estética de horror, la literatura y música gótica encontré en algún que otro portal de la cultura oscura una reseña de estas muñecas. Cada una de ellas era tan fascinante como inalcanzable. Pasaba horas mirando una por una, leyendo sus poemas, sus historias y lamentándome no trabajar y vivir en un país latinoamericano que en ese entonces ya soñaba más de lo que vivía (ahora multipliquen eso por mil)

¿Qué hacía entonces? No me avergüenzo de decirlo: Creaba las mías propias con cartapesta ¡Eran tan feas, y tan hermosas a la vez! Dedicaba horas a hacerlas (imagínense, no estudiaba, no trabajaba... tenía todo el tiempo del mundo que no gastaba socializando) las pintaba, las guardaba prolijamente... y así las mantuve hasta que hubo que salir a la vida, hacer amigos, estudiar una carrera, ponerme de novio, recibirme, trabajar, sufrir las consecuencias de elegir relacionarme con malas personas y los años pasaron y pasaron y el recuerdo de las Living dead dolls se fue enterrando a medida que fui creciendo (por dentro, por fuera ya me quedé así)

Trece años después me encontraron ya con 31 años, trabajando, ganando medianamente bien para sostenerme, con amistades más sanas y un noviazgo de lo más parecido a lo ideal. Una suerte de llamado tardío despertó en mí para recordarme de aquellas criaturas... y dije "Un momento... ¡Ahora trabajo! ¡Ahora gano mi propio dinero y puedo gastarlo en algo tan loco que todos van a pensar que soy un inmaduro! ¡Pero yo sé que no lo soy! ¡Y que siempre quise tenerlas! ¡Es el momento!" Estaba con mi novio cuando aquel despertador irreversible sonó en mí y me llevó corriendo a la PC, mi querida y vieja fuente de conocimientos, mi amiga que me conecta con el mundo cada vez que lo necesito y escribí por primera vez ese nombre, después de tantos años, esta vez en un diferente tipo de buscador: Mercado Libre.

No recuerdo las que salieron, pero aparecieron algunas. Y mi emoción a medida que las veía y que veía que sus precios no eran tan inaccesibles. Facebook me recordaba que trece años atrás había escrito una lista con algunos aspectos que me definían. Uno de ellos decía "No me quiero morir sin antes haber tenido, al menos, una Living dead doll" Sonreí, porque fue como reencontrarme con aquel pequeño (no tan pequeño eh, pero bueh, digamos que tardé en madurar) que creía que jamás iba a trabajar y conocer el placer de "mimarse a uno mismo dándose los gustos" Aquel fue el comienzo de todo, fue pensar: Voy a hacerlo, voy a gastar en algo que no sea ropa o cosas vitales. Somos seres humanos ¡Claro que creamos nuestras propias necesidades! Somos caprichosos por naturaleza, nos rodeamos de las cosas que nos definen ¡Y esperé tanto por esto!" 

¿Por qué este blog se llama así? Simplemente porque hoy día me define mucho mi trabajo, mi pasión, soy profesor de Prácticas del Lenguaje y Literatura en escuelas secundarias. Es mi pasión principal, y mi relación con mis alumnos me permite darme a conocer de la forma más transparente sin miedo a los prejuicios. Ellos conocen mi afición por las Living dead dolls ¡Y les encanta! Me conocen como el profesor "de los muñecos de terror" y muchos de ellos siempre están preguntándome si voy a comprarme uno nuevo o si tengo alguno en mente (incluso también colegas, me preguntan) Siempre les respondo lo mismo: ¡Me encantaría! Pero vivimos en un país donde es muy complicado conseguir piezas importadas o cuyo valor está muy por encima de nuestra moneda ¡Es tan difícil! Es por eso que me las rebusco para siempre encontrar la oportunidad de que la vida me cruce con alguna de ellas ¡Y voy a tratar de no perderme ninguna! Los invito a acompañarme en este recorrido fascinante, que siempre me trae nuevas sorpresas,nuevas anécdotas y nuevos "hijos" a esta familia que, deseo, siga creciendo.